Audi Prologue, un nuevo estilo se aproxima

Nuevas terminaciones, apliques renovados, tecnología de punta y una eficiente mecánica, esas son las cualidades más destacadas que ostenta el flamante modelo de pruebas alemán.

Salones | conduciendo | 19/11/2014 | Compartir

Se abrieron las puertas de una nueva edición del Salón de Los Ángeles y se dio a conocer el Audi Prologue, el prototipo que, al margen de esbozar la estructura que podría llegar a tener el futuro A9, enseña el nuevo lenguaje de diseño que la compañía de Ingolstadt comenzará a aplicar en sus próximos modelos.

Dotado de una carrocería de 16,7 pies de longitud, 9,6 pies de distancia entre ejes, 6,4 pies de ancho y 4,6 pies de alto, este ejemplar es más corto y más plano que el actual A8. A simple vista se nota el linaje propio de la automotriz alemana; sin embargo, y a diferencia de los vehículos que se ofrecen hoy en día, este coupé cuenta con una nueva parrilla Singleframe adornada con terminaciones de tipo diamante, que se ubica en una posición más baja y se extiende más hacia los costados.

Los faros, portadores de la tecnología láser Matríx de alta definición, agudizaron su ceño y son más estilizados y elegantes. Asimismo, el toque deportivo lo otorgan las tomas de aire delanteras que parecen estar apoyadas sobre aletas, las nervaduras que se ubican en medio de un afilado capó, los pasos de rueda ampliamente ensanchados, la elevada línea de cintura y las llantas de 22 pulgadas de diez radios equipadas con neumáticos de tamaño 285/30. Por su parte, los guardabarros, puertas y paneles laterales traseros muestran superficies musculares curvas. La zaga, en tanto, porta una luneta cóncava, un portón que al terminar pretende confeccionar un alerón, un difusor color negro brillante con dos salidas de aire trapezoidales y grupos ópticos sobre cada extremo que se unen mediante una tira de luces de LED.

Dentro del habitáculo, el Audi Prologue conjuga terminaciones lujosas y modernas con una serie de tecnologías que tienen como única función hacer que la estadía de los pasajeros sea lo más amena y placentera posible. A través de la sincronización del auto con el smartphone de cada individuo habitual abordo se ajusta automáticamente la posición del asiento y la temperatura del aire acondicionado según los gustos preestablecidos. Los apoyacabezas traseros, están escondidos en los respaldos cuando no son utilizados, emergen al detectar la presencia de un ocupante.

Fiel a la tendencia “menos es más”, no aparecen botones ni apliques por ningún lado y se le dio rienda suelta a un trío de pantallas LCD que permiten manejar las diversas funciones de conducción, entretenimiento y la comunicación. En una cuarta pantalla el conductor puede controlar el sistema de climatización y hasta puede utilizar el panel táctil para escribir.

Lejos de presumir algún tipo de mecánica híbrida o eléctrica, en este caso se luce un propulsor V8 biturbo de 4.0 TFSI capaz de producir 605 caballos de fuerza y 516,3 libras-pie de par que se asocia a una caja automática Tiptronic de ocho relaciones que distribuye la potencia mediante un sistema de tracción integral quattro. Como complemento existe un modo de conducción denominado overboost que da lugar a aumentar el torque, por alrededor de 15 segundos, hasta las 553,2 libras-pie. Al margen de su peso en vacío de 4,365.2 libras, el Audi Prologue puede acelerar de 0 a 62,1 mph en apenas 3,7 segundos y ostenta un consumo de combustible combinado de 27,4 mpg.

En pos de optimizar la conducción se instaló una suspensión independiente con amortiguadores controlados electrónicamente que hace el manejo más estable y varían la distancia al suelo según sea el terreno. Además, hay un nuevo sistema de dirección que hace que las ruedas traseras giren en un máximo de cinco grados para mejorar la maniobrabilidad cuando se circula a altas velocidades.

Antes de que este concept se convierta en modelo de producción y lleve el nombre de A9, hay que esperar a ver sobre qué próxima generación de automóviles de Audi influye primero.