Clase y deportividad al aire libre

Mercedes-Benz presentó al AMG S 65 Cabriolet 2017, un modelo que cuenta con el lujo habitual pero que además incorpora toda la potencia de la marca deportiva.

Sin categoría | conduciendo | 23/12/2015 | Compartir

Mercedes-Benz siempre va un poco más alla de lo comun. El nuevo AMG S 65 Cabriolet 2017 está dotado de lo más altos estándares de tecnología aplicados en función de la seguridad, eficiencia y confort de sus ocupantes. Si todo ese nivel le sumamos la deportividad que le brindan los técnicos de AMG el combo se convierte en una delicia.

En cuanto a su motorización, equipa un 6.0 litros V12 que entrega unos 630 caballos de potencia y 738 lbs-pie de torque asociada a la transmisión AMG SPEEDSHIFT PLUS 7G-TRONIC dirigida a las ruedas traseras. Esta configuración es similar a la utilizada en las variantes S 65 Sedán y S 65 Coupé y se introduce por primera vez en un convertible. Gracias a este conjunto recorre de 0 a 100 Km/h. en sólo 4,1 segundos.

Su exterior está pensado para brindarle un salto de calidad y diferenciarse del AMG S 63 pero aún así no resigna el estilo agresivo. Muestra terminaciones cromadas, llantas de 20 pulgadas, rejillas al estilo “panal de abejas” y las doble salida de escape. En su interior, trata de hacer equilibrio entre los elementos en aluminio y los apliques que denotan exclusividad. La tecnología también dice presente con su pantalla situada por detrás del volante y otra central. Sus asientos revestidos en cuero con un tramado único reflejan calidez.

La cuestión de seguridad pone a disposición de los ocupantes un sin fín de sistemas de asistencia para su resguardo. El dispositivo de frenado automático de detección de peatones, sistema de freno adaptativo y el dispositivo de prevención de colisiones lo sitúan como uno de los grandes vehículos en los que nada le puede salir mal.

El Mercedes-Benz AMG S 65 Cabriolet 2017 está listo para ofrecer todo lo que su cliente necesita.