Una vida junto al deporte

En el marco de Piloto X Un Día en los Fiat Linea Competizione, Fernet Branca celebró su histórico vínculo con el deporte a través de sus 170 años.

Sin categoría | conduciendo | 24/11/2015 | Compartir

Hay marcas que están vinculadas a diferentes acciones aunque la propia firma no tenga nada relacionado ha ese tipo de ejercicios. Una de las más representativas en este ítem es Fernet Branca, una firma de bebidas, que con el paso del tiempo ha tenido un estrecho lazo con el deporte tanto en Argentina como a nivel mundial.

Branca se asoció al automovilismo en Argentina desde hace muchísimos años. Esta es una tradición aquí y en Italia, donde también se vincula la marca con el deporte motor. En el país, la marca acompaña el Dakar hace seis años, al Mundial de Rally (en donde tiene un recorrido propio, el Tramo Súper Especial “Fernet Branca”, y hace entrega de un trofeo al ganador de este trayecto) y a la Fiat Abarth Competizione en las doce carreras anuales que lleva a cabo la categoría monomarca que comparte circuitos con el Super TC2000.

Además del automovilismo, Fernet Branca acompaña eventos de golf y de Polo, éste último a través del clásico más importante del calendario hípico argentino y competencia hípica con más historia e importancia en el turf sudamericano e iberoamericano: el Gran Premio Carlos Pellegrini.

Por otro lado, desde hace muchos años tiene una fuerte vinculación con el rugby argentino, donde creó un programa de concientización llamado “Branca, Único como el corazón del rugby”, con el cual se capacita al personal y jugadores de los clubes acerca de la “muerte súbita” y de cómo combatirla.

Piloto X Un Dia

Ese vínculo con el deporte nos llevó, una vez más, a manejar los Fiat Linea Competizione. Este evento, realizado por tercer año consecutivo, nos da la posibilidad a los periodistas de conducir un vehículo de competición.

El primer año que manejé tuve la incertidumbre de cuanta diferencia hay entre un auto de carrera con un vehículo de calle. Sentado en la butaca empecé a palpar que es bastante la semejanza, donde note el volante con dirección asistida, la caja en H y hasta las perillas de refrigeración. Claro está que la jaula antivuelco, el gran reloj de revoluciones y la omisión del tablero de instrumentos, le dan el toque deportivo habitual. Ese año debut para mi fue una experiencia única donde después de una vueltas de conocimiento pude hacer una vuelta de 59.6 que me dejó con una alegría enorme.

La segunda vez que me subí al Linea Competizione el objetivo estaba en superar el tiempo del año anterior. Varias vueltas haciendo «dibujos raros» me dieron la pauta que había que bajar un poco más la velocidad y hacer el circuito más redondo. Al volante te vas dando cuenta cuando haces un buen giro y cuando la desperdicias. Esa vez sentí que las últimas habían sido las mejores y cuando se cerró la tanda me informaron que había logrado un 59.2. El objetivo estaba cumplido.

Un apasionado por el automovilismo tiene en mente que cada vez que se sube a un auto de carrera debe mejorar los conseguido anteriormente. Este año, Gustavo Der Ohanessian nos contó que los autos estaban mejorados y que podíamos mejorar nuestros tiempos. Ya en la primera tanda la vuelta estaba en 58.2 -un segundo menor al record del año anterior- y yo aún no había girado.

Cuando llegó mi turno salí decidido a «exprimir» al máximo al Linea Competizione. La experiencia te da algunas enseñanzas para poder acelerar y doblar mejor. Poco a poco iba estirando en cada curva para mejorar el tiempo. Tanto fui estirando que cuando faltaban unos pocos minutos para finalizar la tanda terminé haciendo un trompo que me llevó al pasto donde quedaron mis esperanzas para seguir girando. A pesar de todo, logré un 57.2 que me llenó de satifacción porque pude bajar unos dos segundos mi tiempo record del año anterior.

Fernet Branca tiene una estrecha unión con el deporte y el automovilismo es uno de sus vínculos más fuertes. Esta relación nos da la posibilidad a los periodistas de manejar los Fiat Linea Competizione y disfutar nuestra pasión desde adentro.