Fiat 500C

Homenajea al automóvil "descubierto" de 1957, pero al mismo tiempo, propone soluciones de vanguardia en el sector de los motores y del bienestar a bordo.

Sin categoría | conduciendo | 19/03/2009 | Compartir

Creado por el centro de estilo de Fiat y fabricado en el establecimiento de Tichy (Polonia), el automóvil ha sido pensado con un enfoque "open source" (aporte de nuevas funciones a un producto existente y de gran éxito).

En efecto, el Fiat 500C hereda todas las características ganadoras del modelo estándar como la seguridad en lo máximo de la categoría, la habitabilidad que ofrece cuatro plazas cómodas para adultos y un maletero que no debe renunciar a preciados centímetros de capacidad. Además, el maletero, gracias a un ingenioso sistema de bisagras de paralelogramo, ofrece un acceso simplificado incluso cuando la capota está en posición de apertura total.

Con su innovadora capota que, según la marca, asegura una verdadera ventana al cielo, el nuevo 500C conserva las mismas dimensiones de la versión convencional (3,55 m de longitud, 1,65 m de anchura y 1,49 m de altura) y comparte los tres propulsores: el turbodiesel 1.3 Multijet de 75 caballos de potencia combinado con un cambio mecánico de cinco marchas y los dos de gasolina 1.2 de 69 CV y 1.4 de 100 CV, ambos disponibles con cambio mecánico o robotizado Dualogic.

Además, como confirmación del compromiso de Fiat en el campo de la protección del medio ambiente y de la movilidad sostenible, el 500C adopta un innovador sistema «Star&Stop», el dispositivo que controla la parada temporal del motor y su posterior arranque.

La capota caracteriza por los cinematismos con mando eléctrico y por la adopción de soluciones técnicas de gran terminación y cuidado. Disponible en tres colores (marfil, rojo y negro), la capota original se combinará con numerosos tonos de carrocería entre las cuales dos, han sido creadas a propósito para este nuevo vehículo: un rojo perlado y un gris típico de los súper deportivos.

El 500C establece nuevos estándares en confort y seguridad, técnica y dotaciones, sin renunciar al inconfundible «estilo italiano". De esta manera nace un cabriolet que regala grandes emociones, asegura el máximo placer de conducción y conjuga una línea fascinante con las prestaciones de motores elásticos y respetuosos del medio ambiente.