FXX K, un híbrido de 1.050 caballos

Dotado de una gran serie de innovaciones tecnológicas, este nuevo ejemplar es la versión de competición de LaFerrari y será utilizado para el programa de estudio Corse Clienti.

Novedades | conduciendo | 03/12/2014 | Compartir

Ferrari presentará en el circuito Yas Marina de Abu Dhabi al FXX K, el prototipo de un “vehículo-laboratorio” que forma parte de un programa de investigación y desarrollo y que será el primer modelo híbrido nacido en Maranello con destino de circuito.

Así como hace algunos años atrás apareció el FFX Evoluzione, este flamante bólido -basado en el modelo LaFerrari– fue construido sin tener en cuenta los reglamentos de homologación y de carreras, dado que, al menos en un principio, no está pensado que ingrese a las líneas de producción masiva ni que sea un automóvil de competición. La idea es que sea utilizado para realizar un programa de pruebas a lo largo de dos años con un grupo de “clientes-probadores”.

La mecánica del FXX K consta de un sistema híbrido que conjuga un motor V12 de gasolina con uno eléctrico. La K que figura en el final del nombre hace referencia a la utilización del sistema KERS, el cual permite recuperar energía cinética y entregarla para que el propulsor de combustión, que ostenta 6262 cm³ de cilindrada, pueda erogar 860 caballos y que el eléctrico añada otros 190 HP para así lograr una potencia total de 1.050 caballos y un par máximo de más de 900 Nm. Por su parte, el cambio es automático de doble embrague con siete relaciones.

Para completar el apartado técnico y lograr estas cifras, la compañía incluyó nuevos árboles de levas, un tren de válvulas modificado con empujadores mecánicos en lugar de hidráulico, el circuito de admisión está rediseñado, un tratamiento especial de pulido para mejorar el flujo del aire y un sistema de escape que carece de silenciadores.

Gracias al nuevo sistema HY-KERS, que fue optimizado para ampliar las prestaciones y darle lugar al conductor de que seleccione el modo de conducción adecuado desde el Manettino alojado en la consola central. Hay cuatro posiciones: “Qualify”, para obtener el máximo rendimiento en un número limitado de vueltas; “Long Run”, para optimizar la constancia en el rendimiento, “Manual Boost”, para entrega instantánea máxima de par y “Fast Charge”, para activar la recarga rápida de la batería. Otros elementos que favorecen a la conducción son los amortiguadores magneteorológicos y el control de tracción F1-trac.

Ferrari anuncia que “este diseño es una aplicación de los conceptos desarrollados para mejorar el equilibrio de aerodinámica en la categoría GT de la WEC (Campeonato Mundial de Resistencia)”, competencia que Il Cavallino ha ganado por tres años consecutivos. Debe ser por eso que este “hyper-deportivo” dispone en la parte delantera de un spoiler de doble perfil y un divisor más grande, que es 30 mm más bajo, con un hueco en el centro. Dos pares de elementos verticales, una tapa y en el exterior todo un nuevo sistema de aletas verticales sirven para canalizar el aire hacia los flancos del vehículo, lo que genera un vórtice longitudinal que crea una depresión localizada. Esto a su vez succiona la estela de las ruedas a la parte exterior de la parte de abajo aerodinámico. Los faldones laterales también ayudan a aislar el flujo de aire desde la parte de abajo para aumentar su eficiencia.

A diferencia de LaFerrari, en la sección trasera un hay spoiler móvil que es capaz de extenderse 60 mm más, una aleta vertical y una pequeña ala a cada lado actúan como guía e incrementan la eficiencia del alerón. La existencia de un grandísimo difusor posterior beneficia aún más a la resistencia al viento. De acuerdo a lo informado por la firma, el FXX K posee una mejora del 50% en la carga vertical con la configuración de baja resistencia aerodinámica y un 30 % en el caso de la configuración de mayor carga, lo que supone 540 kg de carga aerodinámica a 200 km/h.

En pos de la dinámica, se colocaron neumáticos lisos Pirelli con sensores que monitorean la aceleración longitudinal, lateral y radial, así como la temperatura y la presión. Esto asegura un análisis preciso de la interacción entre el neumático y la superficie de la pista, proporcionando datos aún más vitales para permitir que el sistema de control de tracción garantice el máximo rendimiento.

Por el momento no se reveló el precio que tendrá cada una de las unidades destinadas a la venta, aunque hay que pensar en varios millones. De todas maneras, lo más probable es que ya no quede ningún FXX K, por lo que no es necesario ponerse de mal humor.