Lamborghini debe su nacimiento a una riña con Ferrari

Presentamos un repaso histórico en torno a la disputa entre estas dos poderosas firmas italianas especializadas en automóviles deportivos.

Sin categoría | conduciendo | 26/10/2012 | Compartir

El nacimiento del toro encuentra estrechos vínculos con il cavallino rampante. La historia cuenta que hacia 1960, Ferruccio Lamborghini, un millonario fabricante de maquinarias agrícolas, era dueño de un garaje colmado de automóviles deportivos entre los cuales aparecían modelos Mercedes-Benz, Maserati, y también Ferrari, una compañía que por entonces ya contaba con más de treinta años en el mercado automotor. Los desperfectos mecánicos de algunos de sus ejemplares Ferrari, más precisamente el 250 GTB, solían traerle más de un disgusto al señor Lamborghini. Entonces decidió llamar personalmente al dueño de aquella firma para manifestar su descontento.

Palabras del propio Lamborghini: »Los Ferrari sólo me generaban problemas (…) Un día, ya harto de mandarlos al taller, llamé a Enzo para decirle que sus automóviles eran pura basura”. Enzo Ferrari le respondió que un fabricante de tractores no puede entender sus deportivos.

Aquel fue el primer capítulo de una rivalidad que se extiende a lo largo de las décadas. Tras la breve riña telefónica, Ferruccio decidió instalar su propia fábrica de automóviles deportivos (Automobili Lamborghini Holding) y convertirse en rival directo de la marca identificada con el color rojo. La primera planta fue instalada en el año 1963 en Sant’Agata Bolognese, a pocos kilómetros de Maranello, sede de Ferrari.

Tras la presentación de un prototipo denominado 350 GTV y la aparición de los modelos 350 GT y 400 GT; hacia 1967 Lamborghini alcanza su primer gran éxito de la mano de Miura, el primer automóvil de producción en ubicar un motor V12 en posición central, modalidad que en principio fue criticada por Enzo Ferrri aunque, ante la evidencia del buen paso de Miura en la industria, la firma de Maranello también se volcó hacia este tipo de motores en sus deportivos.

Desde 1998 integrada al grupo Volksvagen, en 2013 Lamborghini celebrará su cincuenta aniversario siendo ya una marca afianzada en el olimpo de los súper deportivos, con modelos instalados en la historia y actualidad de la industria como el Gallardo, el Countach, el Murciélago y el Aventator, entre otros.